PIEZA DEL MES ETNOGRAFÍA

JUNIO 2020

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Número de Catálogo: 29077(63)9.37b1-56


Olla de Los Reyes Metzontla


Los Reyes Metzontla es una comunidad indígena popoloca cuya tradición alfarera tiene continuidad desde la cerámica prehispánica Tepeji Viejo y Cuthá en el sur del estado de Puebla. Su cerámica es muy apreciada por la finura de sus formas, la delgadez de las paredes, el uso de engobes rojizos, así como por los finos pulidos o bruñidos hechos con cera de abeja. Las vasijas que se elaboran son, principalmente, para uso doméstico como ollas, jarras, cuencos, platos, vasos, cucharones y comales; sin embargo, para la venta foránea confeccionan vasijas fitomorfas y zoomorfas con imágenes de calabazas, nopales, órganos, pájaros, tlacuaches, borregos, cerdos y coyotes, entre otros.

Lo que distingue particularmente esta cerámica es el proceso de elaboración. Las mujeres son las encargadas de fabricarla, mientras que los hombres proveen las materias primas y el combustible, mismos que son acarreados desde los terrenos aledaños donde se ubican los bancos de barro y los bosques donde se colecta la leña de combustión.

Esta olla de barro fue modelada a partir de un núcleo de arcilla color crema sin desgrasantes. Las paredes de la vasija tomaron forma con apoyo de una madera rolliza; las paredes curvadas se lograron mediante un fragmento de guaje, asimismo, presenta un bruñido fino logrado con la ayuda de un pulidor. Su cocción es a temperatura media entre 400 y 600 grados centígrados en hornos cilíndricos a combustible de leña de cactáceas. La decoración manchada se obtiene cuando la pieza se saca del horno, aún estando caliente se le baña con agua de nixtamal, la evaporación produce el efecto chorreado que sirve también como decoración secundaria, además que tapa los poros de la cerámica sellando el material y evitando el filtrado de los líquidos depositados durante su uso.

La distribución de la cerámica se hace por medio de venta por dinero o por trueque en los mercados de la región, siendo la producción más importante en la fiesta patronal y la de los muertos.

Los talleres y el proceso productivo son por familias, mientras tanto existe una cooperativa que acopia la producción para la venta a los turistas.

Mtro. Arturo Gómez Martínez
Curador–investigador, MNA