PIEZA DEL MES ARQUEOLOGÍA

JULIO 2020

HOME / PUBLICACIONES / PIEZA DEL MES / Homo antecessor

Homo antecessor


El árbol evolutivo que conduce hasta nuestra especie Homo sapiens aún contiene más misterios que certezas, pero algunas cosas las sabemos bien. Tenemos la confianza en decir que hace cerca de siete millones de años surgió un linaje del que son parte los chimpancés y otro en cual aparecieron primates capaces de caminar erguidos en dos piernas. También sabemos con seguridad que hace poco menos de dos millones de años emergió de entre estos bípedos una rama representada por el Homo erectus, una especie alta, con piernas largas, brazos más cortos y cerebro grande, capaz de fabricar herramientas y de la que eventualmente derivó nuestra especie.

Después de que los grupos del género Homo salieron de África y se dispersaron por Asia y Europa surgieron humanos con mucha variabilidad, de entre los que destacan los humanos modernos y los célebres Neandertales. Una historia precisa de ese periodo de la evolución humana no está clara y arroja una pregunta difícil: ¿existe una especie que pueda considerarse el ancestro común de humanos y Neandertales y cuál es?

En opinión de algunos científicos, la respuesta es que sí existe, por eso nombraron a su hallazgo Homo antecessor, y suponen que se trata del penúltimo paso en nuestra filogenia.

El primer ejemplar de Homo antecessor fue hallado en julio de 1994 en la cueva de la Gran Dolina en Atapuerca, España. Se trata de un rostro juvenil con parte del cráneo y una porción del cuerpo mandibular con tres molares derechos que presenta una morfología mediofacial moderna. El estudio de la cara parece indicar que no pertenece al “grado erectus” y que no parecen ser Neandertales, además, a pesar del parecido, tampoco son candidatos a humano moderno. Esto llevó a sus descubridores a concluir que Homo antecessor es a la vez predecesor común de nuestra especie y de aquella que resulte la ancestral directa de los Neandertales.

No obstante, para confirmar esta teoría, es necesario encontrar la presencia del Homo antecessor en África dado que ese continente es la cuna de nuestra especie, lo que hasta ahora no se ha logrado. Otro punto de vista consiste en no tratar de agrupar exhaustivamente en especies todos los fósiles que nos encontramos y pensar que este tipo de ejemplares son el paso previo al nacimiento de la humanidad tal como somos hoy.

En espera de evidencia futura que resuelva la controversia, contemplamos la cara del joven de la Gran Dolina como un misterio evolutivo. 

Dr. Juan Manuel Argüelles
Dirección de Antropología Física