Número de Catálogo: (13) 28.31f6V-187

Angaría de palma

La angaría es un tipo de cesto tejido con ramas de palma real dispuesto sobre dos o tres arcos de madera que funcionan como marco. Es un instrumento de trabajo tradicional que los guarijó utilizaban para la pizca de maíz y para cargar alimentos o herramientas al hombro o amarrado sobre un burro. Las angarías más grandes también se usaron para cargar y resguardar a los recién nacidos mientras las mujeres caminaban sobre las veredas de la sierra.

Para elaborar una angaría deben remojarse las barras de madera durante varios días para hacerlas flexibles y darles una forma circular. Para el tejido de la cesta, el artesano integra las tiras de palma mientras las frota con sus manos y va formando un mecate largo con el que teje el cesto, los bordes y una larga trenza que sirve para sostener la angaría por el hombro. 

En la lengua guarijó, la palma real se denomina saó y es una planta que forma parte de las prácticas económicas y culturales del pueblo ya que se emplea para la elaboración de múltiples instrumentos cotidianos como angarías, escobas, sombreros, camas y un tipo de cestería a la que llaman waari. Inclusive en los tiempos pasados, la palma se utilizaba para enterrar a los muertos sobre petates de este mismo material. 

Adicionalmente, los guarijó consideran sagrados todos los objetos confeccionados con esta palma: sus creencias y usos de la planta forman parte de un complejo cultural de prácticas, representaciones artísticas y mitológicas centrales en la identidad étnica del grupo. 

Uno de los relatos del pueblo menciona que la palma fue un regalo de dios, a quien llaman No´no, para protegerlos del diablo, Yawaloci. Cuentan que en el principio del mundo No´no y Yawoloci peleaban y, para escapar, No´no subió hasta la punta de una palma para que Yawoloci y sus demonios no lo encontraran. No´no, que estaba en lo más alto de la palma, formó una cruz y la arrojó hacia ellos diciendo: “Si me van a matar, tomen la cruz primero”. Los demonios trataron de cortar la palma con un hacha, pero esta se cuarteaba una y otra vez con cada golpe. Gracias a la palma, No´no logró escapar de Yawoloci y pudo irse al cielo. Este relato explica por qué la palma es sagrada y salvaguarda a los guarijó de toda manifestación del mal. Cargar con la angaría de palma representa una forma de trabajar cerca de Dios y permanecer protegidos de accidentes en la casa o de los chubascos y los rayos durante las jornadas de trabajo en las milpas.

Mtro. Donaciano Gutiérrez Gutierréz
Curador-investigador, MNA

Dra. Claudia Jean Harriss Clare
Investigadora, DEAS-INAH